Cuando uno va a Londres todo es caro… todo menos los museos. The National Gallery es uno de esos lugares que quienes disfrutan del arte enlistan como indispensable al realizar un viaje a la capital británica. Aunque yo de arte se lo mismo que de checoslovaco pensé en cultivarme un poco y de paso ver los girasoles de Van Gogh que me quedaron pendientes en Amsterdam.*
La entrada gratuita al museo y el terrible calor que hacía motivaban todavía más a entrar a al majestuoso edificio que combina un poco de inspiración griega con otros elementos. Una vez adentro había que comenzar el recorrido, en realidad, por donde uno gustara aunque a mi parecer lo mejor es seguir la cronología de las obras. Con arte que va desde el siglo XIV hasta el XX el museo tiene un poco para cada gusto.
La selección de obras renacentistas incluye Venus y Marte de Boticelli, La Madonna dei Garofani de Raphael, El Sepulcro de Miguel Ángel y La Virgen de las Piedras de Da Vinci. Ahora que si no ubican a ninguno de estos artistas entonces sí… usted puede considerarse inculto y dejar de leer aquí.
Además de las obras renacentistas encontramos cuadros de Diego Velázquez, Jan Van Eyck (de quien seguramente conocen al menos ESTA pintura aunque no tengan ni idea que es de él), Monet y Cezanne. Pero entre todos los nombres y los periodos yo me encontré fascinada (como cuando era chiquita y veía el pasillo de las Barbies) cuando vi An Experiment on a Bird in the Air Pump de Joseph Wright of Derby. He de admitir que nunca había escuchado del artista pero para quienes no sabemos de arte y de pronto vemos un oleo que bien podría ser una fotografía editada con photoshop resulta sorprendente (o tal vez sigo teniendo cinco años por dentro).
El museo no permite fotografías, sin embargo, es posible adquirir varias guías en las que destacan las obras. El mejor recurso que ofrece, que además está disponible también en línea, es su lista de treinta obras que no pueden perderse. Aunque la lista puede o no coincidir con nuestros gustos (por ejemplo no está mi favorita) vale la pena utilizarla como referencia.
*Los girasoles de Van Gogh se encontraban como pieza a préstamo en The National Gallery hasta el 27 de julio.
La Vita Random 
06/08/2014 en 17:46
TIENES que ir a Ámsterdam entonces. Cuando veas en el Rijksmuseum las obras de Rembrandt, te vas a sorprender igual o más que con las obras de Wright, ambos son maestros en plasmar luces y sombras. Me gusta que viajes por mí, Schweine ❤
08/08/2014 en 01:33
Ya fui a Amsterdam pero tienes razón, a ese museo tengo que regresar.